El presidente de la República, João Lourenço, habla en la apertura de la III Sesión Legislativa de la IV Legislatura de la Asamblea Nacional

5 de octubre de 2020

Presidente de la República habla en el Parlamento por cuarta vez

Por cuarta vez, desde que asumió el cargo el 26 de septiembre de 2017, el presidente de la República, João Lourenço, se dirige a los angoleños, el 15 de octubre, desde el Parlamento, en el tradicional discurso sobre el Estado de Nación.

La intervención de João Lourenço, que emana de un imperativo constitucional, marcará el punto culminante de la ceremonia de apertura de la IV Sesión Legislativa de la IV Legislatura de la Asamblea Nacional.

Al igual que en 2017, 2018 y 2019, el Presidente angoleño se dirige a la Nación en un contexto muy complejo para Angola, desde el punto de vista económico, social y epidemiológico, por lo que su discurso es esperado con anticipación, internamente y por la diáspora angoleña.

En esta nueva visita al Parlamento, el estadista presentará las medidas implementadas por el Ejecutivo, a lo largo del año, y las políticas públicas recomendadas para solucionar los principales problemas, promover el bienestar de los angoleños y para el desarrollo del país.

La presentación del discurso del Estado de la Nación representa un momento único para que el Presidente de la República hable sobre el impacto de sus políticas de gobernabilidad y haga balance de los principales logros y dificultades encontradas durante el presente año.

En 2017, por ejemplo, en su primera visita al Parlamento, con este mismo propósito, João Lourenço enumeró una serie de prioridades que ha estado buscando materializar, con énfasis en la diversificación de la economía y el fortalecimiento del sistema democrático.

Prometió, por cierto, invertir en la capacitación y dignificación de los servidores públicos, para seguir modernizando la Administración Pública, a partir de la simplificación de los trámites administrativos y la reducción de costos en que incurrirán ciudadanos y empresas.

También aseguró que trabajará por una mayor transparencia en la contratación de servicios por parte de la Administración Pública, y trasladar a las Autoridades Locales del texto constitucional a la realidad de los hechos, para que el Estado esté más cerca de la ciudadanía.

Prometió apostar por un sistema judicial más rápido y cada vez más comprometido con la justicia, además de avanzar con un programa de promoción de exportaciones y sustitución de importaciones, en el que el actor principal es el sector privado, nacional y extranjero.

João Lourenço habló de la creación de condiciones para invertir seriamente en la agricultura y la industria manufacturera, comprometiéndose a incrementar la participación de estos sectores en la estructura del PIB, a dejar de depender de la industria petrolera, entre otras promesas.

En 2018, por su parte, el Presidente de la República regresó a la "casa de leyes" y realizó un detallado balance de su primer año de gobernanza, habiendo destacado, en su mensaje, el tema de los préstamos producto de la diplomacia económica.

Afirmó, rotundamente, que el Ejecutivo ya estaba "frenando e incluso anulando algunas de las prácticas que más dañan el erario público y los intereses de la gran mayoría del pueblo", ratificando la promesa hecha de que nadie tendría "privilegios ante la ley".

También hizo balance del Programa de Estabilización Macroeconómica, implementado a partir de enero de 2019, considerando alentadores los resultados obtenidos, además de hablar del Plan Interino, que abarcó el período de octubre de 2017 a marzo de 2018.

Es un programa que, luego de unos nueve meses de implementación, ya tuvo "resultados alentadores", siendo un medio necesario para que el país logre el objetivo de incrementar la producción nacional, fortaleciendo competitivamente al sector empresarial privado, promover las exportaciones del sector no petrolero de la economía y reducir las importaciones de bienes de consumo esenciales.

En ese momento, João Lourenço reafirmó la intención de Angola de comenzar a producir gran parte de lo que necesita para el consumo local, a fin de reducir la presión sobre las divisas, que luego se utilizarían para importar maquinaria y equipo.

Con esta medida, el Gobierno de Angola buscó asegurar el aumento de la producción nacional, generar más puestos de trabajo, incrementar los ingresos de la población y mejorar la calidad de vida de los angoleños, combatiendo así la pobreza.

En otra área, João Lourenço habló sobre el impacto esperado con el Programa Nacional de Apoyo a la Producción, la promoción de exportaciones y sustitución de importaciones, PRODESI, que ha sido una palanca importante para la diversificación económica en los últimos meses.

Pese al contexto adverso, el Mandatario mantuvo este discurso de esperanza en 2019, destacando, en su momento, que el foco seguía siendo el buen gobierno, la defensa del rigor y la transparencia en todos los actos públicos, la lucha contra la corrupción y la impunidad, la reanimación y diversificación de la economía, la recuperación de los valores de ciudadanía y la moralización de la sociedad.

En su mensaje al Parlamento, afirmó que ya se han tomado muchas medidas para combatir las prácticas erróneas y condenables y, como resultado, la percepción mundial de Angola estaba comenzando a "cambiar en la dirección positiva".

Aseguró la estrategia continua de implementar las reformas estructurales necesarias para crear una Angola diferente en el futuro, tras haber anunciado que se estaba implementando la evaluación de la calidad de los activos de las 13 instituciones financieras bancarias más grandes del país.

También habló del Programa de Privatizaciones, que prevé la privatización de 195 empresas o activos del Estado, 32 de las cuales están clasificadas como empresas de referencia.

Así, para este año (2020), se espera, en un principio, que el Presidente de la República acuda al Parlamento para enviar un nuevo mensaje de esperanza a los angoleños y extranjeros residentes en Angola, ante la preocupante situación que trae el Covid-19.

En un momento en el que Angola y el mundo se enfrentan a la pandemia, se espera que João Lourenço destaque el esfuerzo que ha realizado el Gobierno angoleño, en el marco de la gestión de la llamada "nueva normalidad", impuesta por esta enfermedad silenciosa y letal.

En este sentido, todo apunta a que el mensaje presidencial debe, de alguna manera, resaltar las medidas tomadas para encontrar un equilibrio entre la preservación del buen vivir y el mantenimiento de la máquina económica mínimamente funcional.

En cuanto a la preservación de la vida, el enfoque de la comunicación presidencial al país debe basarse, en particular, en los esfuerzos del Gobierno para crear condiciones para la prueba de poblaciones y la promulgación de medidas preventivas y de bioseguridad.

En el frente económico, hay indicadores de que el enfoque del mensaje debe centrarse en el imperativo de mantener la economía mínimamente acalorada, para que el país cumpla con sus compromisos con la población y la comunidad internacional.

En este tema en particular, es casi seguro que el presidente João Lourenço reafirmará la promesa hecha en su primer mensaje sobre el Estado de la Nación, dado el 16 de octubre de 2017, de que inició su mandato con el objetivo de "enfocarse" en su acción gubernamental para "solucionar" los problemas de las personas, con un mayor enfoque en el sector social y la diversificación de la economía.

En este sentido y en este contexto, el Presidente sin duda reconocerá que, a pesar de los avances en todos los ámbitos de la vida social, aún queda mucho por hacer y se habría hecho más, sin las limitaciones que impone el Covid-19.

A juzgar por la situación económica y financiera actual del país, el foco dominante, en relación a la economía, también puede ser el esfuerzo que viene desarrollando el Gobierno, enfocado a mitigar los principales problemas que atraviesan las poblaciones más vulnerables.

Así, todavía se espera que el presidente João Lourenço, en su discurso del 15 de octubre, se centre en la asistencia social que se ha brindado a la población más necesitada, en el marco de los programas PIIM, PAC, PRODESI y KWENDA.

Específicamente relacionado con estos programas, João Lourenço ciertamente debe abordar el esfuerzo del Gobierno para negociar con los acreedores internacionales de Angola, con miras a volver a perfilar (renegociar) la deuda y su servicio.

Al respecto, cabe señalar que la crisis económica angoleña se ha manifestado con mayor agresividad desde 2014. Se trata de una disminución provocada por el hecho de que Angola está honrando su endeudamiento externo con garantía petrolera, cuyo precio ha caído drásticamente.

En términos de estimaciones, cabe señalar que, en 2019, los gastos del servicio de la deuda representaron alrededor del 51 por ciento del gasto total del Presupuesto del Estado (OGE), un porcentaje relativamente alto.

En cuanto a la deuda pública angoleña, ha estado rondando el 90 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), y el Gobierno está trabajando para reducirla a solo el 60 por ciento.

En este capítulo, es importante tener en cuenta que Angola ha venido financiando sus déficits presupuestarios recurriendo al endeudamiento externo, lo que reduce aún más su capacidad para atender las necesidades de la población más necesitada.

Por parte del Gobierno angoleño, hay estimaciones que indican que la renegociación de la deuda dará como resultado una acumulación cercana a los US $ 6 mil millones, para el 2023, monto que debería invertirse en mejorar las condiciones de vida de las poblaciones más vulnerables.

Por ello, se cree que el Presidente de la República seguramente también debería abordar el tema de los préstamos del Fondo Monetario Internacional (FMI), institución que recientemente pasó de USD 3.700 millones a 4.500 millones.

Como era de esperar, y a medida que se acerca el final del quinquenio, casi no hay duda de que el presidente angoleño volverá a hablar en este Mensaje a la Nación sobre el tan discutido tema de las autoridades locales.

Se espera que el estadista recuerde las gestiones ya tomadas por el Ejecutivo para acelerar la conclusión del Paquete Legislativo Municipal, dejando, en manos de los diputados, la responsabilidad de aprobar las leyes definitivas, para permitir la convocatoria de las Elecciones Locales.

En la misma dirección, se espera que João Lourenço pueda hablar sobre la preparación de las Elecciones Generales 2022, además de resaltar los avances del país en términos y libertades fundamentales, en los últimos tres años, especialmente la libertad de prensa.

En cuanto a los demás temas de actualidad e interés, se espera que el Presidente de la República acerque a la ciudadanía, nuevamente, temas relacionados con la reforma del Estado, la moralización de la sociedad, la lucha contra la corrupción y el fortalecimiento del espíritu de ciudadanía, principalmente entre los jóvenes.

Los esfuerzos por la estabilización macroeconómica, la lucha por bajar la inflación a un nivel de un solo dígito y el impacto en el Programa de Privatización (PROPRIV) serán inevitablemente parte del discurso presidencial sobre el Estado de la Nación.